Honduras conformada por sus pobladores es un efecto de sus tres fuentes culturales de ahí que su culinaria refleje su evolución histórica y de las regiones geográficas culturales que conforman el territorio nacional:
· Región Septentrional o del Caribe: donde resaltan los platillos y bebidas propias de la zona costanera del caribe, la influencia de las Compañías Fruteras y del ingreso de población migrante afroamericana y de la población ingresada de Levante o Arabesca a finales del siglo XIX y principios del siglo XX tras la disolución del Imperio Turco (de lo cual se desprende que en el subconsciente popular le continue llamando Turcos) tras la Primera Guerra Mundial. – Resaltan de esta región entre otros productos de la gastronomía nacional: Tapado Costeño, el Guifiti, Sopa Marinera, Tostones o plátano en rodajas como acompañamiento del plato principal, el Jamo en Sopa, etc.
· La Región Central o Intermedia: que ocupa diez de los departamentos que están tierra adentro o en el centro del país, que por su fuerte influencia colonial y al ser la sede de la mayor parte de la población nacional, se enmarca en las raíces indígenas y/o coloniales, siendo algunas muestras de su gastronomía que enriquece el garbo nacional: Totopostes, Ticuco con Chipilín, Atol de Maíz o Atol Chuco, Nacatamales y Tamalitos Pisque, Chicha, Cususa, Carne asada con Flor de Izote, Mondongo, etc.
· Región del Sur o del Golfo de Fonseca: que está conformada por los dos departamentos adjuntos a la rada de Fonseca, con amplia influencia de los países hermanos y vecinos de El Salvador y Nicaragua, cuenta entre otros de las siguientes muestras culinarias: Pupusas, exquisitez culinaria, como todos los platos de la Región Mesoamericana fundamentada en el Maíz, Pozol, Sopa de Garrobo, etc